Hermandad de la Sed

CINCUENTA AÑOS DE NAZARENOS EN NERVIÓN

NH Daniel Perera Pavo

La cofradía de Nervión siempre ha tenido un sello diferente a lo largo de su historia. Ese carácter distinto se fraguó desde el origen fundacional al am­paro del Concilio Vaticano II. El carácter de los hermanos fundadores y las circunstancias hicieron que desde aquellos Viernes de Dolores nuestra co­fradía tuviera detalles de cofradía sencilla de barrio. Pero al realizar Esta­ción de penitencia a la Santa Iglesia Catedral se mantuvo el carácter de co­fradía sobria y elegante, aunque sin perder la esencia del barrio al que per­tenecemos. Obviamente, los años permitieron una evolución de nuestra hermandad en la calle, pero las personas que participaron en el diseño y configuración de la misma le dieron el carácter que hoy tiene.

El hermano de la cofradía de Nervión, al colgarse al cuello la cruz y el cordón rojo, sabe que forma parte de una historia corta pero rica en saber hacer y, sobre todo, sabe darle sentido a vestirse con un hábito nazareno, un roquete o un costal. Por supuesto, la hermandad ha evolucionado hasta ser lo que es hoy, desde los inicios fundacionales y la sobriedad de los Viernes de Dolores, hasta el crecimiento en el número de nazarenos. Pero nunca ha dejado de tener su propia idiosincrasia, su particular forma de entender una Estación de penitencia y el cariño que los hermanos han puesto en ha­cer grande a nuestra cofradía. Con una estación de penitencia de casi 14 horas de duración, podemos escribir muchas anécdotas y curiosidades que han sucedido. Muchas de ellas se han quedado en el recuerdo de las perso­nas que las vivieron, pues cada hermano tiene su vivencia.

Con este repaso histórico a todas las estaciones de penitencia pretende­mos recoger en negro sobre blanco algunas de ellas: las personas que parti­ciparon con responsabilidades y la evolución que hemos experimentado en estas cinco décadas de nazarenos en Nervión.

1971. 2 DE ABRIL
Imagen tomada tras la primera salida del Cristo.

Por fin, después de muchas vicisitudes, la ilusión de los cofrades y herma­nos fundadores de nuestra Hermandad se cumplía. Realizamos la primera estación de penitencia por las calles del barrio. En esta primera ocasión só­lo procesionó el paso del Santísimo Cristo de la Sed, acompañado por capi­lla musical con un total de 102 nazarenos que formaron en el cortejo, el cual comenzó su discurrir a las nueve de la noche.

La hermandad había luchado mucho para llegar a este momento, en­frentándose a la Sevilla cofradiera que no veía con buenos ojos las nuevas corporaciones. De hecho, el propio Cardenal Bueno Monreal informó al Consejo de Cofradías que la hermandad no iba a sacar túnicas de nazareno, sino hábitos penitenciales. La presión siguió hasta última hora, de tal modo que, durante todo el día, en el despacho parroquial se recibieron llamadas de amenaza de forma anónima para que la hermandad no saliera.

Pero tampoco fue fácil ese día ya que una lluvia muy intensa acompañó al cortejo durante la jornada. El Correo de Andalucía llegó a titular “Heroica estación de penitencia de la Hermandad del Cristo de la Sed”. Era tanto lo que se había luchado que, al salir el Cristo de la Sed bajo la lluvia, el público irrumpió en un aplauso que poco a poco fue acallado para llegar al recogi­miento que la cofradía transmitía.

La compostura con la que los hermanos aguantaron bajo la lluvia resis­tiendo “hasta el límite”, hizo que la hermandad se ganara el respeto de la Sevilla cofradiera y marcara la línea de seriedad y compostura que siempre nos ha caracterizado. De hecho, los primeros años los hermanos nazarenos tenían prohibido girar el cuello en ningún momento de la estación de peni­tencia. En la presidencia del paso del Santísimo Cristo de la Sed, participa­ron el Superior y varios miembros de la Orden de San Juan de Dios.

En este primer Viernes de Dolores estaba previsto que se visitara la Cár­cel Provincial, el templete de la Cruz del Campo, el Colegio de la Sagrada Familia y el Sanatorio de San Juan de Dios. La hermandad comenzó su dis­currir, pero a los pocos metros comenzó el primer chaparrón y aun así se decidió continuar con la estación de penitencia. En la Prisión Provincial fuimos recibidos por su director y desde la azotea se escuchó una saeta cantada por una reclusa. Desde allí, se incorporaron al cortejo funcionarios de prisiones, algo que sería tradicional en los Viernes de Dolores. Las cró­nicas dirán sobre las visitas a la cárcel los Viernes de Dolores: “…el Señor de la Sed se sitúa –a distancia– ante la fachada principal de la cárcel. No hay nada especial. Sólo eso: un saludo de la cofradía a esos hombres que están allí dentro”. Realmente el Cristo de la Sed sólo entró dentro de la Cárcel el viernes de Dolores de 1994, en el Via+Crucis celebrado durante el XXV Aniversario.

El cortejo continuó hacia el templete de la Cruz del Campo y el Colegio Sagrada familia de forma acelerada, pero como la lluvia se hizo más inten­sa, finalmente la cofradía volvió y no se pudo visitar el Sanatorio de San Juan de Dios. El Correo de Andalucía indicó: “Al filo de las dos y media, el Cristo de la Sed, empapada su sangre en agua, volvía a la parroquia de la Concepción. Aún había gente acompañándolo. La duda sobre la supervi­vencia de esta nueva experiencia, aún queda en el aire. Pero en los anales – ¡sabe Dios lo largos que pueden ser! – de esta cofradía ya queda escrito que salió por primera vez a la calle un día en que Dios se encargó de apagar, mientras pasaba el Señor, la terrible sed de lluvia que Sevilla arrastraba des­de hacía meses”. El recorrido previsto fue Padre Coloma (actual Cristo de la Sed), Padre Pedro Ayala, Alejandro Collantes, Mariano Benlliure, Prisión Provincial, Andrés Bernáldez, Tordesillas, Juan de Oñate, Luis Montoto, Templete de la Cruz del Campo, Marqués del Nervión, Eduardo Dato, Jar­dines del Sanatorio de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, Eduardo Dato, Beatriz de Suabia y Padre Coloma.

Aquellos años se caracterizaron por muchos detalles que marcaban el cortejo, como que los acólitos vestían con túnica y cinturón de esparto o que desde el primer año se utilizaron cruces arbóreas. Igualmente, el corte­jo no tenía varas de ningún tipo, siendo completado en años siguientes con varas sencillas coronadas por una cruz. Este año el Diputado Mayor de Go­bierno fue D. Juan Muñoz Muñoz y presidía la hermandad nuestro párroco fundador, D. Manuel Calero. Las cuadrillas de costaleros profesionales es­taban dirigidas desde este año por Máximo Castaño y Jesús Basterra como auxiliar.

1972. 23 DE MARZO
1972. El Cristo visitando la prisión provincial.

Este Viernes de Dolores se completó el anhelo de la Cofradía de Nervión, al hacer estación de penitencia con dos pasos, incorporándose al cortejo el paso de Santa María de Consolación Madre de la Iglesia. El paso de palio logró salir con mucho esfuerzo y con numerosos enseres cedidos por dis­tintas hermandades. La dificultad fue tal que se habían encargado unos respiraderos y estos llegaron con el cortejo de palio sa­liendo, siendo colocados antes de salir la Virgen, sobre la marcha.

Antes de salir la hermandad, una representación de la Hermandad de Nuestra Señora de Consolación de Utrera le hizo entrega de una imagen de la patrona de dicha ciudad para la delantera del palio. La entre­ga fue hecha por don Salvador de Quinta, hermano mayor, y fue bendecida por nuestro párroco Don Ma­nuel Calero.

Este año sí, la hermandad visitó el Sanatorio de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, tras visitar la cár­cel. En las visitas de los Viernes de Dolores, el cortejo ocupaba los jardines del hospital. La entrada se hacía por la puerta principal del sanatorio. Se notó un gran aumento del cuerpo de nazarenos tras la experiencia del año anterior, subiendo a 201 nazarenos, y la cofradía fue acompañada por una gran multitud deseosa de Semana Santa y de ver la ejemplar esta­ción de penitencia de nuestra hermandad. El acompañamiento musical del paso de palio fue la Banda de Música del Regimiento de Soria 9, que acom­pañaría a la Virgen los primeros Viernes de Dolores. Curiosamente los dos primeros años, la Virgen entraba de espaldas al finalizar la estación de pe­nitencia. Este año el Diputado Mayor de Gobierno fue D. José Rodríguez Lechuga, ejerciendo como presidente de la gestora D. José Luis Morón Ro­dríguez.

1973. 13 DE ABRIL

La estación de penitencia de 1973 está marcada como recuerdo a nuestro párroco fundador Rvdo. P. D. Manuel Calero Gutiérrez, fallecido en no­viembre de 1972, motivo por el cual el varal derecho del palio llevaba cres­pón negro. En este año la hermandad decidió no llegar al templete de la Cruz del Campo, manteniendo primero la visita a la Prisión Provincial y luego la Estación al Sanatorio de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder. Co­mo curiosidad, en la salida de la cofradía, un hermano vestido con el hábito de la Hermandad cantó una saeta al Santísimo Cristo de la Sed desde la rampa. Este año, tras la fusión en 1972 con la Hermandad Sacramental, los cirios del cortejo del paso de cristo eran de color rojo, frente al tiniebla de los dos primeros años. Este año vuelve a ejercer como Diputado Mayor de Gobierno D. Juan Muñoz Muñoz.

1974. 5 DE ABRIL
1974. El palio con los candelabros de cola de la Esperanza de Triana.

En 1974 se adelantó la salida de la cofradía a las siete de la tarde, visitando la Prisión Provincial sobre las nueve de la noche y por San Juan de Dios a las once de la noche, con un cortejo de aproximadamente 300 nazarenos. La banda de música del Regimiento de Soria 9, dirigida por D. Pedro Morales, que acompañaba al paso de palio, interpretó por primera vez la marcha Cristo de la Sed a la salida del crucificado.

Aquel año fue por una circunstancia excepcional. En 1973 se habían es­trenado los candelabros de cola, pero se partieron antes de Semana Santa. Enterada de dicha circunstancia, la Hermandad de la Esperanza de Triana, de manos de su Hermano Mayor, D. Antonio Ordóñez, a través de nuestra hermana Dª María Teresa Alonso de la Florida, desmontó sus candelabros de cola dos días antes del Viernes de Dolores y fueron recogidos por varios hermanos. Se trasladaron a Nervión y se montaron en el paso de Santa Ma­ría de Consolación Madre de la Iglesia. Al día siguiente fueron devueltos limpios para que volvieran a lucir en el paso de Nuestra Señora de la Espe­ranza. En todas las crónicas de dicho Viernes de Dolores, podemos consi­derar la consolidación total de nuestra hermandad en la Sevilla cofrade, creciendo con fuerza el debate sobre nuestra incorporación a la nómina de la Semana Santa. Además, en esta estación de penitencia se estrenó el pri­mer hermano mayor de la hermandad tras la Junta Rectora, Joaquín de la Prida Barrera.

1975. 21 DE MARZO

Se estrenaron los candelabros de cola actuales y la candelería, obra de José Manuel Ramos. El paso de palio llevaba un crespón negro por D. Agustín Serrano, miembro de la Junta de Gobierno e impulsor de las ayudas a los hijos de reclusos de la cárcel de La Ranilla.

El recorrido cambió totalmente, empezando primero con la visita al Sa­natorio de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y continuando después ha­cia la Prisión Provincial; al contrario que los primeros Viernes de Dolores. Es importante recordar que en dichos años el Hospital de San Juan de Dios estaba muy orientado a la rehabilitación de niños con enfermedades como la poliomielitis y, por tanto, la visita de los años anteriores se hacía muy tar­día. Como detalle, durante estos años, nuestra hermana Dª Estrella Toleda­no acostumbraba a recolectar caramelos en una caja de cartón, que eran repartidos por los nazarenos entre los niños del Sanatorio de San Juan de Dios. Curiosamente al llegar al hospital se tocaron marchas de campanille­ros floreados, existiendo polémica al respecto. El itinerario fue: Padre Coloma, Beatriz de Suabia, Eduardo Dato, Hospital de San Juan de Dios, José Luis de Casso, Padre Coloma, Marqués del Nervión, Alejandro Collantes, avenida Cruz del Campo, Andrés Bernáldez, Mariano Benlliure, Alejandro Collantes, Padre Pedro Ayala y Padre Coloma. El número de nazarenos se­guía en aumento, llegando hasta los 340.

1976. 9 DE ABRIL
1976. El palio en la noche del Viernes de Dolores.

Aquel año tuvo un Viernes de Dolores complicado en lo climatológico con un cielo totalmente cubierto durante toda la jornada, aunque con poco viento, lo que decidió a la Junta de Gobierno a comenzar la estación de pe­nitencia aunque mirando en todo momento al cielo. Ya eran años donde la multitud que veía la cofradía contrastaba con la ejemplaridad del desfile procesional de la cofradía de Nervión con más de 350 nazarenos.

Ya se hablaba de que el año 1977 sería el año de incorporación a la Cate­dral, algo que tardó un poco más. Como curiosidad, ese año se había reali­zado una campaña de recogida de tabaco organizado por el Patronato de Nuestra Señora de la Merced (ayuda a los penados) que fue entregada a los funcionarios de prisiones al llegar a la Ranilla. Volvió a ejercer D. José Ro­dríguez Lechuga como Diputado Mayor de Gobierno.

1977. 1 DE ABRIL

Como verdadero “pórtico de la Semana Santa”, la cofradía estaba total­mente consolidada y la Sevilla cofradiera clamaba por nuestra presencia en la Carrera Oficial, no sin opiniones divergentes. Pero dicha consolidación tenía el reflejo en la gran cantidad de público que acompañaba el recorrido penitencial.

Aquel Viernes de Dolores de 1977 el cortejo no llegó hasta la puerta de la cárcel, quedándose a unos 100 metros en la calle Melchor Gallegos. El mo­tivo fue que por aquellos años había un movimiento de presos en lucha, COPEL, y existía miedo a que se produjera un altercado en la puerta de la Prisión Provincial. Fue el primer año como Hermano Mayor de D. José Par­dal Merino, quien dos años después lograría el anhelo de hacer Estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral. También, fue el primer año de Salva­dor Dorado “el Penitente” como Capataz General de la cofradía, auxiliado por Manolo Santiago.

1978. 17 DE MARZO

Este año la cofradía siguió adelantando su horario de salida hasta a las seis de la tarde para adecuarlo al del Hospital de San Juan de Dios. Éste último Viernes de Dolores salieron más de 500 nazarenos. Por vez primera, Santa María de Consolación lució el pectoral que le había regalado en la Misa de Comunión del Jueves de Pasión el Cardenal Bueno Monreal. Como curio­sidad, en este año de 1978 la cofradía pasó por primera vez por la calle Go­ya. A mitad de dicha calle, un cable de luz, que se encontraba a baja altura, fue superado con dificultad, rozando la cruz del Cristo con el mismo, pro­duciéndose un corte de luz en dicha calle y en gran parte del barrio.

1979. 11 DE ABRIL
1979. Jesús de la Salud Moreno Bazaga, primer capataz de la cuadrilla de hermanos costaleros, José Luis García Benítez y Pedro, un colaborador.
El capataz Rafael Franco llevando el paso de la Virgen.

Por fin, tras muchas vicisitudes, negociaciones y anhelos, la hermandad pudo realizar estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral el Miérco­les Santo. Fue un día de muchos estrenos, siendo el principal la capa y cín­gulos de los nazarenos de la hermandad. El recorrido se realizó en 11 horas, siendo la salida a las 13:30 h. y la entrada se efectuó a las 00:30 h. La her­mandad, en agradecimiento a las cofradías de la jornada, dejó una rosa en el Palquillo para cada paso de palio de la jornada, tradición que se ha man­tenido hasta la actualidad. Al llegar a este punto, el Diputado Mayor Go­bierno, saludó al Consejo y dijo “¡Ya estamos aquí!”. A continuación, D. Ri­cardo Mora Cárdenas pidió la venia que, a partir de ese momento, se sigue solicitando con la fórmula que se escribió aquel año.

La Junta de Gobierno pretendió en todo momento mantener el orden que había caracterizado a la cofradía los Viernes de Dolores. Los nazarenos mantuvieron la compostura sobria, sin comer ni salir al servicio. Sin em­bargo, la hermandad dispuso que, al llegar la cofradía al Hotel Internacio­nal, en la calle Águilas, se hiciera un momentáneo descanso y los nazarenos pudieran comer, descansar y hacer sus necesidades. Lamentablemente, es­ta acción no resultó como se esperaba y se cambiaron las normas para los años siguientes, con más sentido para una cofradía con tantas horas en la calle. Este año volvió a ser Diputado Mayor de Gobierno D. Juan Muñoz Muñoz. Fue además el primer año de cuadrilla de costaleros hermanos en el Santísimo Cristo de la Sed con Jesús de la Salud Moreno Bazaga como capataz, auxiliado por José Luis García Benítez. Esta cuadrilla de herma­nos costaleros del paso de Cristo mantuvo el espíritu sobrio y de recogi­miento, rezando en las paradas de todo el recorrido y sin levantar los faldo­nes. El paso de palio continuaba llevando costaleros profesionales al man­do de Rafael Franco Rojas.

1980. 2 DE ABRIL
Costaleros junto al inolvidable capataz Federico González Artillo.

Tradicionalmente, este año 1980 es conocido como el “año de la calor”. Pe­ro fue un día mucho más allá de eso. Por primera y única vez nuestra her­mandad fue a la ida por el puente de San Bernardo (cuyo ingeniero cons­tructor fue D. José Luis de Casso, primer hermano mayor de nuestra Her­mandad Sacramental). Lo motivó el hecho de que la segunda hermandad de la jornada fuera La Lanzada y no San Bernardo. Además, por este mismo motivo, ha sido el único año en el que nuestra cofradía ha llegado a la Ca­rrera Oficial por Tetuán, Velázquez y O’Donnell.

La circunstancia antes reseñada, de altísimas temperaturas, con termó­metros al sol de más de 40 grados, causó grandes estragos en el cuerpo de nazarenos y costaleros. Se llegó a tomar con un termómetro una tempera­tura de 60 grados debajo del paso. En el paso de palio, en la cuadrilla de costaleros profesionales de Montellano, salió un costalero ciego, proce­dente de Utrera. Al llegar a la Campana, le dijo el capataz a la cuadrilla “Ea, ya sois costaleros de Sevilla”. Entonces, las cuadrillas no se doblaban como ahora, por lo que poco a poco fue disminuyendo el número de costaleros. Hasta tal punto que varios hermanos que salían de nazareno, cambiaron su túnica por el costal para finalizar la estación de penitencia.

Se estrenaron las capillas en bronce del paso del Santísimo Cristo de la Sed. Fue el primer año de D. Juan Muñoz Muñoz como presidente de la Rectora, ejerciendo igualmente de Diputado Mayor de Gobierno. Salió por primera vez la banda de la Soledad de Cantillana tras el paso de Palio. Co­mo curiosidad, esta banda tenía en su repertorio una salve cantada a la Vir­gen, que se tocó varias veces en el recorrido. A consecuencia de ello, el Con­sejo de Cofradías mandó a la hermandad un oficio pidiendo explicaciones sobre los cánticos realizados y pidiendo que no se repitiera en lo sucesivo. La cuadrilla del paso de Cristo fue llevada por Manolo Guerrero y Federico González Artillo.

1981. 15 DE ABRIL
1981. Cuadrilla de costaleros

Estos años, en los que la hermandad transitaba por el desaparecido puente de la Calzada, el Diputado Mayor de Gobierno dispuso que, para evitar te­ner que parar los pasos en la parte más alta del puente, el cortejo de nazare­nos avanzara lo máximo posible. Una vez el puente quedaba despejado de nazarenos se subía en una única “chicotá”. Este año, tras la experiencia del año anterior, la cuadrilla tenía el refuerzo de costaleros de la cofradía del Gran Poder de Dos Hermanas, por si fuera necesario, coordinados por An­tonio Berbe Molina. Finalmente, la cuadrilla de hermanos hizo el recorrido completo sin ser necesario el refuerzo.

1982. 7 DE ABRIL

Fue un día de mucho calor y bochorno. La Virgen estrenó una saya confec­cionada con un traje de Espartaco. Fue el último año en el que salieron los nazarenos sin escudo ni en la capa ni en el antifaz. Al llegar la cofradía al inicio de Luis Montoto, el Santísimo Cristo de la Sed se rompió dos dedos de la mano derecha. De forma urgente la hermandad de San Benito se puso a disposición de nuestra cofradía. El entonces prioste D. Carlos Morán se subió al paso y pegó los dedos del Señor. Fue una acción rápida que permi­tió seguir discurriendo la cofradía. Al llegar la hermandad a la Plaza Virgen de los Reyes, una representación de la hermandad se acercó al cardenal Bueno Monreal para ofrecerle un ramo de flores. Esta costumbre se man­tuvo hasta su fallecimiento. Normalmente, cuando pasaba la hermandad se le escuchaba decir “Ésta es la mía… la mía”. Tras la tensión acumulada du­rante el día, el Diputado Mayor de Gobierno, D. Juan Muñoz, tomó la deci­sión que la banda de cruz de guía, del cuerpo de bomberos de Sevilla, en el tramo final de la calle Padre Coloma desde la esquina con Lionel Carvallo, se incorporara tras el Santísimo Cristo de la Sed que, por primera vez llevó acompañamiento musical hasta la entrada. Fue el primer año de D. José Carrascosa como Hermano Mayor.

1983. 30 DE MARZO

También fue un día de sofocante calor. El Cristo de la Sed, por primera vez tuvo acompañamiento musical el recorrido completo, por parte de la Agru­pación Musical de Jesús Despojado, actual Virgen de los Reyes. Este año el equipo de capataces queda liderado por Federico González Artillo que le terminó de dar la identidad costalera a Nervión, auxiliado por Manuel Guerrero y Antonio Berbe.

1984. 18 DE ABRIL

Primer año con escudo sacramental en el antifaz de los nazarenos. Se estre­naron los faroles laterales del paso del Santísimo Cristo de la Sed, donados por D. Alonso Ruiz y Dª María Teresa de la Florida. También se estrenaron las caídas del palio delantera y trasera, realizadas por Ignacio Escobar, así como los respiraderos del paso de palio, realizados por Villarreal con carte­las de José Zabala. Fue el primer año, por fin, de cuadrilla de Hermanos Costaleros en el palio de Santa María de Consolación. Como curiosidad, salieron 14 costaleros bajo el Cristo de la Sed, de la Sagrada Entrada en Je­rusalén de Dos Hermanas, como hicieron el Domingo de Ramos nuestros costaleros allí. Salió por primera vez tras el Santísimo Cristo de la Sed la Banda de Cornetas y Tambores de Nuestro Padre Jesús de Castilleja y la Banda Municipal de Huévar del Aljarafe.

1985. 3 DE ABRIL

Año de mucho calor para la cofradía, con 29 grados de forma oficial. Se es­trenó la gloria del paso de palio con la Virgen de las maravillas y parte del techo de palio, bordado por Esperanza Elena Caro. Los nazarenos estrena­ron el escudo en la capa. Este año acompañó al paso de Santa María de Consolación la banda de Carrión de los Céspedes.

1986. 26 DE MARZO

Este año se estrenó el bordado final del paso del techo de palio de Santa María de Consolación, terminada por Sobrinos de Esperanza Elena Caro. Al llegar la Hermandad a la Campana se recibió la noticia que había fallecido un costale­ro de San Bernardo, D. José Portal Navarro, afectando la noticia a los costaleros que hicie­ron la “levantá” en el palquillo por él. Fue el pri­mer año de D. Jesús Puerto Castro como Dipu­tado Mayor de Gobierno. Volvió la Cruz Roja tras el palio de Santa María de Consolación.

1987. 15 DE ABRIL

Se vivió de forma muy especial esta estación de penitencia ante el fallecimiento el año anterior de D. Federico González Artillo, consiliario primero y capataz del Santísi­mo Cristo de la Sed, quien tanto contribuyó al crecimiento de la Herman­dad especialmente desde el establecimiento de peluquería que regentaba junto a la parroquia. El paso se paró justo en ese punto como homenaje. Fue un inicio de estación de penitencia bastante accidentado al ceder una tra­bajadera del paso del Señor y tener que hacer gran parte del recorrido con tan solo 25 costaleros. Fue el primer año de Federico González Martel co­mo capataz del Cristo. Se estrenó a la salida la marcha “Consolación de Nervión” de Abel Moreno. Salió por primera vez la Agrupación Musical de San Julián tras el Santísimo Cristo de la Sed.

1988. 30 DE MARZO

Se estrenó la candelería del paso de Santa María de Consolación y la toca de sobremanto de Paleteiro. Este año fue el primero sin nuestro querido Car­denal Bueno Monreal. Desde entonces, todos los Miércoles Santo, al llegar la presidencia del paso de Cristo a la Catedral se pone un ramo de flores en la tumba a quien tanto bien hizo por la hermandad.

1989. 22 DE MARZO

Último año en que salió el paso de Cristo de madera y bronce, con los cua­tro hachones. Fue el primer año en el que se creó una cuadrilla de aguado­res para los nazarenos. Se solicitaron 10 minutos más de paso por carrera oficial, pero existía el problema que el palio de San Bernardo tenía que dejar libre la calle Granada y, por tanto, no podíamos adelantar nuestra lle­gada a Carrera Oficial. Fue el primer año de José Manuel de la Fuente como Diputado Mayor de Gobierno y Gonzalo Alba Morales como capataz del paso de Santa María de Consolación..

1990. 11 DE ABRIL

Este año fue especialmente significativo en la historia de la Hermandad, ya que se estrenó el paso del Santísimo Cristo de la Sed, obra de Guzmán Bejara­no y diseñado por Antonio Dubé de Luque. El paso salió sin dorar, especial­mente, porque el autor quería que se viera la calidad de la talla realizada.

1991. 27 DE MARZO
1991. El paso de Cristo en proceso de ejecución

Fue el último año en que la cofradía pasó por el puente de La Calzada el cual fue derribado a los pocos meses. Por primera vez la cofradía no tu­vo que esperar al final de la calle Sierpes a que el palio de la Virgen del Refugio de San Bernardo pasara por el lateral de los Palcos. Fue el pri­mer año de D. Manuel Rojas González como Hermano Mayor de la Her­mandad.

1992. 15 DE ABRIL

El paso del Santísimo Cristo de la Sed salió ya totalmente dorado, aunque pendiente de completarse con las cartelas. Esta estación de penitencia fue bastante complicada desde el punto de vista organizativo por el discurrir lento del paso de Cristo, hasta el punto de ser apercibidos por el Consejo de Cofradías por la falta de colaboración. No obstante, el paso de Santa María de Consolación, con gran esfuerzo, cumplió en todos los controles. La cruz de guía entró en la parroquia a las 2 de la madrugada y la Virgen pasadas las 3 y cuarto. Fue el estreno de la primera Banda de Cornetas y Tambores del Santísimo Cristo de la Sed. Impulsado por el Diputado de Cultos, D. José Miguel Verdugo (ahora presbítero), los acólitos del paso del Santísimo Cristo de la Sed fueron hermanos de la hermandad. Hasta ese momento los acólitos eran pagados y solían ser alumnos del Colegio de Santo Domingo el Sabio. Este cuerpo de acólitos fue creciendo a lo largo de los años hasta llegar a ser el cuerpo de acólitos de referencia para el Arzobispo en las cele­braciones de la Catedral.

1993. 7 DE ABRIL

Este año el paso del Santísimo Cristo de la Sed salió totalmente completado con las cartelas pintadas por Alfonso Magüesín y el llamador realizado por Ángel Rangel. Fue el año del Pregón de la Semana Santa por parte de nues­tro hermano fundador D. José María Javierre, Pbro., que definió el paso como “un pregón sobre madera”. Se sacaron por primera vez las actuales cruces de penitente. Hasta esta fecha la Hermandad sacaba cruces arbó­reas, compartidas con la Hermandad de San Esteban, siendo característi­cas en nuestro cortejo, pero inadecuadas para tantas horas de estación de penitencia. La estación de penitencia se vio marcada por un hecho compli­cado que, a día de hoy, podría haber tenido mucha más repercusión. Estan­do los primeros tramos de Cristo en la calle Manuel Casana y el resto del cortejo entre la Avenida Eduardo Dato y San Francisco Javier, se produjo una persecución policial a un coche robado. Los ladrones, que no se espe­raban tener la cofradía delante suya, se bajaron del coche en marcha. El vehículo arrolló a tres nazarenos, generando el pánico para los allí presen­tes. Uno de los ladrones que salieron huyendo fue retenido por un hermano diputado hasta que llegó la Policía. Fue el primer año de D. Francisco Jimé­nez Bejarano como Diputado Mayor y el primero de D. Gonzalo Alba como capataz general de la cofradía..

1994. 30 DE MARZO

Este año era el XXV Aniversario de la Fundación de la Hermandad. La no­vedad principal fue el estreno de la nueva Cruz del Santísimo Cristo de la Sed. Un hermano de la cofradía se encontraba convaleciente por leuce­mia en la calle Candilejo. Al llegar la cofradía a la esquina de calle Águilas con Candilejo el paso de Cristo reviró hacia dicha calle. Por su parte el paso de Santa María de Consolación se introdujo bastante en la calle, sin música, para visitar a este hermano que fallecería a los pocos días.

1995. 12 DE ABRIL

Fue una estación de penitencia con mucho calor, con 27 grados de forma ofi­cial. El mecanismo de subida y bajada de la cruz tuvo un problema en el Muro de los Navarros pero pudo ser solventado para no dejar retraso en Carrera Oficial. Éste fue el primer año de penitentes de a tres de forma obligatoria en Carrera Oficial. Además, por primera vez había vallas en la Campana, lo que permitió que no hubiera los problemas habituales hasta ese año con perso­nas cruzando la cofradía para ocupar sus sillas. El palio realizó la entrada a las 3:20 horas, siendo el último año en visitar el hospital por la noche. Este año se realizó conteo de nazarenos por primera vez, con un total de 941 naza­renos al pasar por Carrera Oficial. Sin embargo, las papeletas expedidas fue­ron 992 nazarenos, 24 acólitos y 147 entre capataces y costaleros. Este año fue Diputado Mayor de Gobierno D. Emilio Ruiz Gómez.

1996. 3 DE ABRIL

Se produjo una gran transformación de la cofradía con respecto a las ante­riores estaciones de penitencia hacia la Catedral. Anteriormente, la visita a San Juan de Dios se hacía por la noche, con la entrada de la cofradía a horas intempestivas, y lo que es más importante, sin poder dar consuelo al sufri­miento de los enfermos, que a esas horas estaban descansando. Por tal mo­tivo, la Junta de Gobierno decidió hacer la visita al hospital por la mañana en el recorrido de ida. Se estableció la hora de salida con el Ángelus, a las 12:00 horas. Con dicho cambio, la entrada en el recinto del Sanatorio de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder solo la hacían la presidencia, acólitos, pasos y bandas.

También, de forma pionera, la Diputación Mayor de Gobierno comenzó a usar walkies para comunicarse durante la Estación de penitencia. Al cumplirse los 25 años de la primera salida del Santísimo Cristo de la Sed, por la mañana, Luis Álvarez Duarte entregó las gubias con las que realizó a nuestro Titular. La Virgen estrenó la corona de plata sobredorada, donada en cuestación popular, obra póstuma de Jesús Domínguez, con un diseño similar a la anterior. Fue el primer año como Hermano Mayor de D. Fran­cisco Jiménez Bejarano, Diputado Mayor de Gobierno de D. Francisco Ro­mán Mantero y Francisco Manuel Robles Pérez como Capataz General de la cofradía. Acompañó al Santísimo Cristo de la Sed la Banda de Cornetas y Tambores de San Francisco Javier. Por primera vez, en ambos pasos, los acólitos eran todos hermanos de la hermandad.

1997. 26 DE MARZO
1997. Cuerpo de acólitos de la Hermandad

Al cumplirse 25 años de la primera salida procesional de Santa María de Consolación Madre de la Iglesia, se realizó una llamada por Antonio Dubé de Luque y, por primera vez, hubo lluvia de pétalos desde la torre de la parroquia. D. Carlos Amigo Vallejo, Cardenal Arzobis­po de Sevilla, presenció desde dentro de la parroquia la salida y acompañó a los pasos en el inicio de la estación de penitencia.

A la vuelta por Luis Montoto, dado que entonces ha­bía una mediana, la policía cortó solo un único carril provocando incidencias de tráfico y entrada de vehícu­los desde las calles adyacentes. Salió por primera vez la Banda de Cornetas y Tambores de la Salud de Utrera tras el Santísimo Cristo de la Sed. Cuando entró el paso de Cristo en la pa­rroquia, la banda lo hizo igualmente, recibiendo un aplauso atronador por parte de los costaleros y nazarenos del cortejo de Cristo. La entrada del pa­lio se realizó a las 2:05 horas.

1998. 8 DE ABRIL

La principal novedad de este año fue la incorporación de las hermanas na­zarenas. Éste era un anhelo importante de igualdad entre muchas herma­nas de la corporación. Existen “leyendas” de hermanas que habían hecho estación de penitencia de ‘incógnito’. Anteriormente, a finales de los 80, hubo un cabildo que hubiera hecho que la hermandad fuera de las pioneras en tener hermanas nazarenas, pero sólo hubo un voto a favor. Fueron un total de 54 hermanas las que salieron este año por primera vez. La “levantá” al primer paso se realizó por la Hermandad de Santa Genoveva, ya que ha­bíamos ratificado ese año el hermanamiento. En los primeros metros nos acompañó la alcaldesa de Sevilla, Dª Soledad Becerril. A los pocos metros de la salida se soltó el manto de Santa María de Consolación, circunstancia que se arregló al llegar a San Juan de Dios. Esta circunstancia se repitió nuevamente en la calle Orfila. Al llegar el Cristo de la Sed a la plaza del Du­que, una rama se quedó enredada entre los dedos del Santísimo Cristo de la Sed, permaneciendo las hojas en su mano derecha, pero a los pocos metros se desprendió, continuando sin incidencias.

Sin embargo, el principal reto organizativo que tuvo que superar la cofradía fue, la coincidencia del partido Sevilla-Hércules, partido de la Segunda Divi­sión que se disputó el Miércoles Santo a las 20:00 horas. Esto hacía que coinci­diera el final del partido con el discurrir de nuestra cofradía por Luis Montoto, con los consiguientes problemas de tráfico y coches aparcado que suponía. En­tonces no existía CECOP y la Hermandad, de la mano del Consejo de Cofra­días realizó gestiones con Policía Local, Policía Nacional y Ayuntamiento de Sevilla para montar un dispositivo que permitiera el discurrir procesional sin incidencias. El recorrido por el Centro se realizó un poco más lento de lo habi­tual y, finalmente, se desarrolló tal y como estaba previsto.

Por primera vez realizamos por la noche presentación ante las Herma­nitas de los Pobres al estar los residentes en las puertas del centro. Fue el primer año de la Banda Municipal de La Puebla del Río tras el paso de San­ta María de Consolación.

1999. 31 DE MARZO

Tras la reforma de las reglas, fue el primer año en el que los penitentes sa­lieron con el hábito de los Viernes de Dolores. Dentro de la parroquia no había invitados, lo que hizo que la salida de la cofradía se realizara de forma más eficiente. Este año fue bastante complicado el andar del Santísimo Cristo de la Sed ya que tanto en la salida como en la Catedral se produjeron deficiencias en el cajillo que hicieron que el paso estuviera varios minutos parado en la Puerta de Palos. Este día tuvo incertidumbre meteorológica que no se llegó a concretar y tanto las hermandades de San Benito como la Redención estuvieron todo el día preparadas ante una eventual necesidad de refugio de nuestra cofradía. Este año salieron por primera vez hermanas diputadas de tramo.

2000. 19 DE ABRIL

En nuestra estación de penitencia del Miércoles Santo del año 2000 y con motivo del Año Jubilar y el 450 aniversario de la muerte de San Juan de Dios, la Orden y una representación de la hermandad de Granada nos acompañó corporativamente. En el recorrido de vuelta, al llegar el paso de Cristo a la esquina de Rico Cejudo con José Luis de Casso, el paso de Cristo, con el acompañamiento de los acólitos y sin música, reviró a la izquierda para llegar a mitad de la calle y visitar a una hermana enferma que falleció a los pocos días. Fue el primer año como Diputado Mayor de Gobierno de D. Francisco Javier Martín Guerrero.

2001. 11 DE ABRIL

Esta estación de penitencia se vio marcada por el crecimiento de la cofra­día que hizo bastante difícil el cumplimiento de los horarios. En Campana se cumplieron, pero la salida de la Catedral fue muy difícil y se pusieron al­gunos tramos de cuatro en cuatro.

2002. 27 DE MARZO
2002. Estreno de la reliquia de San Juan de Dios

Se estrenó la reliquia de San Juan de Dios tras el hermanamiento con la or­den Hospitalaria. Esta estación de penitencia se vio marcada por un inicio con bastantes dificultades, ya que al final de la Avenida Eduardo Dato se rompió el varal delantero derecho del palio. Con la colaboración de la Priostía de la Hermandad de San Benito, el paso estuvo parado más de 10 minutos hasta conseguir que se arreglara. En este punto la cofradía acumu­laba 25 minutos de retraso, que se pudieron recuperar con mucho esfuerzo y con la colaboración del cuerpo de capataces y costaleros, llegando inclu­so a dejar dos minutos de adelanto en Sierpes.

En un cúmulo de incidencias durante aquella jornada, el barquito de la Virgen de Consolación se partió y se dio por perdido, aunque fue localizado por un contraguía. Tras el gran esfuerzo realizado a la ida, la cofradía no pudo ganar mucho más tiempo y el palio de Santa María de Consolación entró finalmente a las 2:45 horas. La nueva Banda del Santísimo Cristo de la Sed tocó tras Él hasta la Encarnación y luego continuó la Salud de Utrera. Así se hizo dos años seguidos. Aquel año tocó la Banda Municipal de La Puebla del Río en el paso de Santa María de Consolación a la ida y la Banda Municipal de Mairena del Alcor a la vuelta. Fue el primer año como Dipu­tado Mayor de Gobierno de D. Julio González Escobar.

2003. 16 DE ABRIL

Aquel año se celebró de manera muy especial ya que se cumplió la 25ª esta­ción de penitencia a la Santa Iglesia Catedral. Por este motivo, al llegar al palquillo de la plaza de la Campana, además del Presidente del Consejo Manuel Román Silva, estuvieron los miembros vivos que concedieron la primera venía, Don José Sánchez Dubé y Don Manuel Toro Martínez. Fue el primer año en el que la Oliva de Salteras tocó en el paso de Santa María de Consolación a la ida, manteniéndose Mairena del Alcor a la vuelta. La Banda del Cristo de la Sed llegó este año hasta la Catedral.

2004. 7 DE ABRIL

A la salida, se tuvo especial recuerdo por D. Fernando Isorna Jiménez Pbro., Director Espiritual y Párroco de la Concepción Inmaculada, recien­temente fallecido. Por primera vez desde que se hacía entrada en el Hospi­tal de San Juan de Dios en el recorrido de ida, todo el cortejo entró en el Hospital de San Juan de Dios, utilizándose las puertas laterales para la en­trada y salida de los nazarenos. Fue el primer año como Hermano Mayor de N.H.D. Emilio Ruiz Gómez y se nombraron a D. Andrés Vélez y D. Barsen Luis Valdecantos capataces del Santísimo Cristo de la Sed y a D. Ricardo López Ruiz como capataz de Santa María de Consolación. Volvió a hacer el recorrido completo la Banda de Cornetas y Tambores de la Salud de Utrera.

2005. 23 DE MARZO

Por primera vez en nuestra historia, la hermandad no realizó este año esta­ción de penitencia. Desde bien temprano se anunciaba inestabilidad para todo el día, con distintos frentes lluviosos que podían descargar con cierta intensidad. A las 11.45 horas se reunió por segunda vez la Junta de Gobier­no y tras analizar las distintas posibilidades se decidió no pedir prórroga al Consejo. Así fue comunicado a los hermanos la no realización de la Esta­ción de penitencia y se rezó el Via+Crucis en el interior de la parroquia.

Fue una decisión bastante difícil ya que era la primera vez que la Her­mandad se quedó en el templo y además lucía el sol en Nervión a la hora de la salida. Sin embargo, como se pudo comprobar después, las lluvias que cayeron a partir de las 3 de la tarde hicieron que ninguna Hermandad del Miércoles Santo pudiera iniciar la salida procesional. Como dijo el Herma­no Mayor, D. Emilio Ruiz: “Este año no habrá estación, pero sí penitencia”. Fue el primer año como Director Espiritual de la Hermandad de D. Ángel Sánchez Solís, Pbro.

2006. 12 DE ABRIL

Ricardo López Ruiz, Almansa.

Aquel año se vio de nuevo afectado por la lluvia. La Junta de Gobierno co­nocía que alrededor de las siete de la tarde existía riesgo meteorológico sin concretar. Conforme fue avanzando la estación de penitencia se confirma­ron los pronósticos de lluvia. Al estar el paso de Santa María de Consola­ción en la calle Sierpes comenzó a chispear y el Diputado Mayor de Gobier­no comunicó con Meteorología y les dijeron que en Sevilla estaba lloviendo con bastante fuerza en distintos puntos de la ciudad, aunque en el centro la lluvia era en realidad chispeo. Ante dicha información, la cofradía decidió no sacar la cruz de guía de la Catedral y los tramos se quedaron completa­mente formados en la nave de salida de la Puerta de Palos de la Catedral con los capirotes puestos hasta que se ordenó que se descubrieran. Sin em­bargo, tanto el cortejo como los pasos se quedaron en el lado izquierdo por si la querida Hermandad de San Bernardo decidía continuar su estación de penitencia. No obstante, la Hermandad de San Bernardo mantuvo su Cruz de Guía y paso de Cristo en la nave de entrada a la Catedral sin tomar deci­sión alguna respecto a la continuación de la estación de penitencia. Ante la mejora de las predicciones, la Junta de Gobierno decidió continuar con la estación de penitencia, saliendo el palio de Santa María de Consolación a las 20:01 horas, 36 minutos después del horario previsto con todo el cortejo de la cofradía de tres en tres o de cuatro en cuatro, al objeto de dejar el me­nor tiempo posible al resto de las cofradías de la jornada. La Hermandad del Polígono de San Pablo, nos acompañó con su Hermano Mayor, Estan­darte y dos varas durante la estación de penitencia a la Catedral, fortaleciendo aún más los vínculos de unión entre ambas corporaciones, después de tantos años acompañándoles en su salida procesional por las calles de su barrio En este año se estrenó como capataz general de la cofradía N.H.D. Ricardo López Ruiz, “Almansa”.

2007. 4 DE ABRIL

La mañana del Miércoles Santo del 2007 se inició con cierto riesgo de lluvia, de carácter disperso e intermitente. Dada la falta de precisión de dichos par­tes meteorológicos, la Junta de Gobierno decidió realizar la estación de peni­tencia, estableciendo planes de contingencia en función de la posible lluvia que pudiera llegar. La cofradía empezó a salir con el sol habitual en nuestro discurrir por el barrio. Sin embargo, estando el Cristo de la Sed comenzando su discurrir por Eduardo Dato y el paso de Santa María de Consolación al fi­nal de Cardenal Lluch, comenzó a llover con cierta intensidad. Curiosamen­te, en el paso de Cristo llegó a llover momentáneamente granizo, en el paso de Palio lluvia intensa y en la Cruz de Guía no cayó ninguna gota. El Diputado Mayor de Gobierno consultó con meteorología de nuevo y reiteraron que eran chubascos aislados, momentáneos y que podían ser moderadamente fuertes en escaso tiempo. En dichos momentos, se decidió que el Paso de Pa­lio retrocediera algunos metros en la misma calle Cardenal Lluch hasta el balcón de esquina de la calle a fin de que los auxiliares de Priostía le pusieran un plástico que protegiese el paso de palio en su parte superior. Efectuada dicha maniobra el paso de palio inició su andar hacia la “revirá” con Eduardo Dato. Sin embargo, la realizar dicha maniobra, el viento se llevó completa­mente los plásticos, recibiendo aplauso del público que quería ver directa­mente los ojos y cara de la Virgen. Los plásticos fueron recolocados en San Juan de Dios, pero sólo en el techo, ante una posible repetición de los chubas­cos. Afortunadamente el resto de la tarde fue esplendorosa en todos los sen­tidos y desapareció el riesgo de lluvia.

El año 2007 vino marcado por la incorporación a la nómina del Miérco­les Santo de la Hermandad del Carmen, que hizo que pasáramos por pri­mera vez en segunda posición dentro de la jornada. Se había llegado a un acuerdo horario no sólo en la Carrera Oficial, sino también para dejar libre el paso por la calle Francos y así poder salir el palio de Santa María de Con­solación de la Catedral. En cualquier caso, la Hermandad volvió a cumplir los horarios establecidos, a pesar de la dificultad y el retraso que se acumuló por la lluvia. La Hermandad del Sol, que en este año realizó el Sábado de Pasión su primera salida como Hermandad de penitencia, nos acompañó con su Hermano Mayor, estandarte y dos varas durante la estación de peni­tencia a la Catedral.

2008. 19 DE MARZO

Como todos los años la cofradía se montó y preparó con la ilusión habitual. A nivel organizativo se dio la circunstancia de que no se podían utilizar los sa­lones parroquiales al estar en obras, por lo que toda la cofradía entró por la puerta de la Avenida de la Cruz del Campo. Además, se retiraron de la parro­quia por primera vez todos los bancos permitiendo que cupieran en nuestra sede el mayor número de nazarenos posible. Fue una mañana especial, en el que se estrenaba la Junta de Gobierno de Francisco Javier Escudero Mora­les. Los nervios eran altos a la espera de las informaciones meteorológicas. En la visita protocolaria del Cardenal Amigo Vallejo vimos también por últi­ma vez al Delegado de día, D. Engelberto Salazar, que fallecería apenas 15 días más tarde de una larga enfermedad. Aunque el Miércoles Santo amane­ció con un cielo azul rotundo, las predicciones meteorológicas daban inesta­bilidad para toda la jornada, sin poder concretar en ningún momento la hora e intensidad de dichas lluvias. Por tal motivo, la cofradía comenzó a montar­se con la idea de salir a las 12 de la mañana como estaba previsto. La Junta de Gobierno se reunió hasta en dos ocasiones en Cabildo de Oficiales y se solici­tó 30 minutos de retraso para la salida al Consejo de Cofradías. La Junta de Gobierno, a las 12:00 h. decidió comenzar la estación de penitencia, a pesar que estaba chispeando en la puerta de la parroquia.

La cofradía empezó a salir a las 12:19 h. Sin embargo, a las 12:32 h., cuan­do los ciriales del paso estaban en el dintel y el paso de Cristo estaba a pun­to de levantarse en el interior de la parroquia, el Hermano Mayor y el Dipu­tado Mayor de Gobierno decidieron no continuar con la estación de peni­tencia, al intensificarse bastante la lluvia. La vuelta al templo fue bastante difícil, ya que el cortejo de Cristo tuvo bastantes dificultades para volver al templo al no caber junto al resto de la cofradía en el templo. De hecho, has­ta las 12:53 h. no entró la Cruz de Guía y se rezó por los hermanos difuntos. Ese día continuó lloviendo de forma intermitente, con intensidad, espe­cialmente desde las 14:00 a las 18:00 horas. Ninguna cofradía del Miércoles Santo hizo estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral. Ese año esta­ba previsto que Canal Sur retransmitiera la entrada de la cofradía, por lo que el dispositivo de cámaras no fue utilizado. Fue el primer año como Hermano Mayor de D. Francisco Javier Escudero Morales y de D. Daniel Perera Pavo como Diputado Mayor de Gobierno. Iba a tocar tras el Cristo de la Sed la banda de cornetas y tambores de la Coronación de Espinas.

2009. 8 DE ABRIL
2009. El Cristo de la Sed, con corona de espinas.

Se realizó conteo de toda la Semana Santa. Nuestra cofradía pasó por Ca­rrera Oficial con 1.208 nazarenos. Con este número y con 45 minutos de paso, era la Hermandad más perjudicada de toda la Semana Santa… y sin embargo se cumplió con los horarios. Dada la circunstancia de que la Her­mandad del Carmen pasaba por delante, fue el primer año en que se deci­dió dar un rodeo por Chapineros/Álvarez Quintero para aliviar la salida de la Catedral. Aun así, la cofradía tuvo que seguir saliendo de a tres y dejando retraso en la Puerta de Palos. Por vez primera, el Santísimo Cristo de la Sed hizo estación de penitencia con Corona de Espinas y Potencias. Fue el pri­mer año de la Banda de Cornetas y Tambores de San Juan Evangelista tras ­ el Santísimo Cristo de la Sed. Finalmente, ese año se retransmitió la entra­da de la cofradía en Directo por parte de Canal Sur, lo que afectó un poco al discurrir de la cofradía, entrando el paso de palio a las 2:44 h. Fue el primer año de la Banda de San Juan Evangelista de la Esperanza de Triana tras el palio de Santa María de Consolación.

2010. 31 DE MARZO

En la calle Jiménez Aranda una rama de un árbol se enganchó en el Santísi­mo Cristo de la Sed, manteniéndose así casi una hora hasta que fue retirado cuidadosamente en el Muro de los Navarros. Igualmente, una vela rizada se cayó del costero derecho del paso de Santa María de Consolación al llegar a la Plaza de la Campana, volviéndose a colocar en la calle Sierpes. La cofra­día tuvo un parón importante en la Cuesta del Rosario, debido a un coche mal aparcado que impedía el avance de la Hermandad del Carmen.

2011. 20 DE ABRIL

Se entregaron por primera vez los cirios del primer tramo de Cristo el Vier­nes de Dolores. Se estrenó un nuevo cajillo para el Santísimo Cristo de la Sed que permitió mejorar la seguridad, aumentar la altura del Señor en el paso y facilitar la subida y bajada de la Cruz, hasta tal punto que tanto en la salida de la cofradía como en el Catedral el Cristo se empezó a subir en mo­vimiento. Fue el primer año que la cofradía, para evitar el parón tradicional del Cristo de la Sed en Luis Montoto y los cortes de nazarenos, discurrió por la calle Juan de Zoyas, lográndose que el paso de palio entrara a las 2:20 horas, algo que no hacía desde comienzos de los años 80.

2012. 4 DE ABRIL
2012. Estreno de las caídas del palio de la Virgen.

Se cumplió el anhelo tanto tiempo deseado del estreno de las caídas del palio de Santa María de Consolación Madre de la Iglesia, realizadas en el taller de Charo Ber­nardino. A la salida, se rezó por el alma de Dª Eulalia de los Santos Piazza, Camarera Honoraria de Santa María de Consolación, que había fallecido recientemente.

Fue un día con el cielo cubierto y con bastante vien­to. Por la mañana había cierta inestabilidad, pero los ser­vicios meteorológicos confirmaron la ausencia de lluvia hasta las 17:00 horas, aumentando el riesgo a partir de esa hora al 50%. Conforme avanzó la jornada, este ries­go fue disminuyendo, aunque se mantuvo cierta incer­tidumbre a la vuelta sobre posibles lluvias dispersas que no se concretaron. Al llegar el paso al Muro de los Navarros se descolgó un cable de luz, quedándose col­gado a mitad de la calle. Se desalojó temporalmente la calle, pero se aseguró completamente. Al poco tiempo llegaron bomberos y protección civil dejando caer tro­zos de pared. Solicitaron que la cofradía se parara, pero les hicimos ver que no podíamos pararnos y que el cable no impedía continuar con celeridad la cofradía. Asegu­raron la situación y la cofradía pudo continuar. En la ca­lle Luis Montoto se produjo la rotura de los tornillos del soporte superior del cajillo del Señor que, como medida de precaución, a propuesta de la Priostía, obligó a que el paso del Santísimo Cristo de la Sed se levantara a pulso desde ese punto. A la finalización de la estación de penitencia se pudo comprobar que el cajillo del Señor se encontraba en buen estado y se trabajó en reforzar dicha sujeción para años venideros.

2013. 27 DE MARZO

Por tercera vez en la historia de nuestra hermandad no se pudo realizar esta­ción de penitencia a la Catedral. Aunque los pronósticos eran inciertos a lo largo de la mañana, los contactos con la Agencia Estatal de Meteorología fue­ron confirmando que desde las 12 horas iban a llegar de forma consecutiva varios frentes lluviosos, como así finalmente fue. La Junta de Gobierno por unanimidad decidió no comenzar la estación de penitencia. Durante todo el día la Parroquia recibió de forma continua la visita de hermanos y fieles. En este Miércoles Santo salieron cofradías a partir de la media tarde y, como es tradicional, se entregaron las “rosas de la Sed” en el palquillo a los palios de las Hermandades que hicieron estación de penitencia.

2014. 16 DE ABRIL

A la salida de la cofradía se rezó por el alma de D. José Pardal Merino, Her­mano Mayor que consiguió llevar a la cofradía a la Catedral en 1979, y a D. Manuel Morales Pbro., coadjutor durante varias décadas de la Parroquia, recientemente fallecidos. La jornada estuvo marcada por el calor con 27.1 grados de máxima, según la Agencia Estatal de Meteorología. Como anéc­dota, al pasar por la Iglesia de Santiago, fuimos recibidos no sólo para la Hermandad de la Redención, sino también por la Hermandad de San Ro­que, que este año realizó la estación de penitencia desde allí, al encontrarse su parroquia en obras. En el recorrido de vuelta, en la calle Cardenal Lluch, la Virgen se giró completamente en casa de la recientemente nombrada Camarera Honoraria de Santa María de Consolación Madre de la Iglesia, Doña Reposo Rosillo, algo que se repetiría los años siguientes.

2015. 1 DE ABRIL

La Hermandad siempre había recordado el año 1980 como el más caluroso, de su historia, sin embargo, este año 2015 fue el más caluroso con una tempe­ratura oficial de 31.8 grados según la Agencia Estatal de Meteorología. Fue una de las estaciones de penitencia más duras, aunque no fue menos ejem­plar que otras, demostrando la cofradía gran madurez en la calle. No obstan­te, fue difícil cumplir los horarios en los tramos de sol de la cofradía y, por primera vez en nuestra historia, la Hermandad dejó en Campana un retraso significativo de 6 minutos. Se estrenó el nuevo barco que llevaba en la mano Santa María de Consolación Madre de la Iglesia, realizado por D. Fernando Marmolejo y donado con el esfuerzo y cariño de muchos hermanos.

2016. 23 DE MARZO

Como anécdota, en Eduardo Dato, un hombre ciego se puso junto al costero del paso de Santa María de Consolación, haciendo el recorrido completo hasta carrera oficial, animado en todo momento por capataces y costaleros. Nos acompañó en la estación de penitencia una representación de la Her­mandad de la Milagrosa. Fue el primer año de D. José Cataluña Carmona co­mo Hermano Mayor y D. Juan Francisco de las Cuevas como Diputado Ma­yor de Gobierno.

2017. 12 DE ABRIL

A la salida de la cofradía se rezó por el alma de Dª Reposo Rosillo, Popo, Camarera Honoraria de la Virgen, que había fallecido recientemente tras una larga enfermedad. Se encendió un cirio por los Donantes de Órganos con el lema “Vida y Consuelo”, siendo el primer año que nuestros Titulares habían recibido el patronazgo de los donantes de órganos. Este año se vivió la circunstancia del estreno musical de la Banda de la Escuela Musical San­tísimo Cristo de la Sed en la Cruz de Guía y de la Banda de Cornetas y Tam­bores del Rosario de Cádiz tras el paso del Señor.

2018. 28 DE MARZO

Se recordó en la salida a D. Cristóbal Jiménez Sánchez, Pbro., hermano fundador de la hermandad y D. Manuel Rojas González, antiguo Hermano Mayor, recientemente fallecidos. A la salida del Paso de Cristo, tras la pri­mera “levantá”, se produjo un pequeño contratiempo, al no estar bien asegu­rado el paso de Cristo y éste se bajó levemente. Tras asegurarlo, el Señor continuó sin problemas tras el trabajo de los priostes. La Virgen entró a las 2:10 horas, siendo la hora más temprana en los últimos años, sin perjuicio del lucimiento completo de la cofradía.

2019. 17 DE ABRIL

En el año del Cincuentenario, la cofradía vivió por primera vez, desde 1971, una situación en la que el cortejo completo estuvo bajo la lluvia de forma continua. Esta Estación de penitencia se completó, pero desde por la ma­ñana se conocía que aproximadamente sobre las 20 horas existía riesgo de lluvia. La Junta de Gobierno, por unanimidad, decidió iniciar la estación de penitencia dejando en manos de la Diputación Mayor de Gobierno y el Hermano Mayor la toma de decisiones que fueran necesarias durante el discurrir de la misma. Nos acompañó en la estación de penitencia una Re­presentación de la Hermandad del Cristo de la Sed de Jerez. Al llegar a la Confitería de la Campana, con banderas del Cincuentenario en toda la pla­za, hubo una “petalada” desde los balcones de dicho establecimiento.

Conforme fue avanzando la jornada se confirmaron los pronósticos y, aunque no eran de fuerte intensidad, la cofradía decidió no refugiarse en la Catedral, al contrario que la querida Hermandad del Carmen. Esta cir­cunstancia propició el cambio del recorrido de vuelta para no dar el rodeo de Chapineros, Álvarez Quintero y Villegas, así como tomar un recorrido de vuelta por Luis Montoto, Marqués de Nervión y Cristo de la Sed. En este año del Cincuentenario, por tanto, fue la primera vez en nuestra historia que la cofradía completa se encontraba en una situación de lluvia en todo el cortejo. El cambio de recorrido, junto con el esfuerzo de las cuadrillas de costaleros hizo que la cofradía, completa, estuviera dentro del templo a las diez de la noche. En dicho recorrido de vuelta, la cofradía formó especial­mente compacta, sin descomponerse en ningún momento a pesar de la llu­via. Al llegar el paso de Cristo al barrio se ralentizó por las ramas y los ca­bles, comprimiéndose el cortejo totalmente, hasta tal punto que la Diputa­ción Mayor de Gobierno decidió adelantar casi todo el cortejo de Virgen por las calles Alejandro Collantes y Beatriz de Suabia. Esto hizo que desde que entró el Cristo hasta que entró la Virgen pasaran únicamente 10 minu­tos. La cruz de guía entró a las 21:21 horas, el paso de Cristo a las 21:45 horas y el paso de palio a las 22:08 horas, en medio de una llovizna leve.

Por tanto, como broche a la crónica de las estaciones de penitencia, de nuestros primeros cincuenta años de vida como cofradía, podemos consi­derar esta estación de penitencia del año 2019 como muestra de la madurez de nuestra Hermandad y ejemplo de saber hacer en la calle por parte de todos. ­

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