PASO DEL SANTÍSIMO CRISTO
Cruz de Guía
Autor: Manuel de los Ríos Navarro.
Año: 1981-1983.
En cada cofradía de penitencia sevillana la cruz ocupa el primer lugar, aunque esto no haya sido históricamente siempre así, dado que por González de León conocemos que la novedad se produjo a comienzos del siglo XIX, figurando anteriormente como una insignia más dentro del cortejo. Lo cual justifica que algunas de las cruces de guía más antiguas incorporen diversa iconografía en forma de símbolos de la Pasión. La que ahora estudiamos tiene la tipología de cruz triunfante, es decir, en ella aparece el símbolo de la Redención desprovisto de más símbolos que el titulus crucis (vulgarmente conocido como el INRI) y unas ráfagas en la intersección de los dos maderos en cuyo centro hay una cartela con el escudo de la hermandad, yendo los extremos adornados con remates finalizados en pináculos, mostrando todos los cantos un recubrimiento con una fina cenefa, todo realizado en metal repujado y plateado sobre una cruz de madera pintada de negro. En 1981 registramos el estreno de las ráfagas de la cruz, como primer elemento metálico de su ornamentación, concluyéndose la misma en 19832, todo por el orfebre Manuel de los Ríos Navarro.
El Senatus
Autor: Juan Antonio Curquejo Morales.
Año: 1971.
Una de las insignias más antiguas que conservan las cofradías sevillanas es el conocido como senatus, una recreación de los guiones de las legiones romanas consistentes en un paño pendiente de un asta de orfebrería con la leyenda SPQR (Senatus Populus Que Romanus), que no es otro sino el lema de Roma. Con su presencia se significa que los pasajes de la Pasión que se representan en la cofradía sucedieron en la época de la dominación romana de Judea. Como decimos, es una de las insignias más antiguas, pues su presencia en los cortejos procede de la representación de la Pasión en las que participaban legionarios romanos escenificando diversas escenas, como la crucifixión y el descendimiento -como sucede aún en algunos pueblos de la provincia de Sevilla sucede- previa a la salida procesional de la cofradía. El senatus que estudiamos sigue la tipología de banderín, es decir, se une al asta por un lateral, y con la leyenda SPQR bordada en oro sobre terciopelo rojo, con una sencilla cenefa alrededor del paño, siendo realizado por Juan Antonio Curquejo en 1971
La Bandera de Cristo
Autor: Taller de la hermandad.
Año: 2013.
Es otra de las insignias cuya presencia responde al mantenimiento de una tradición ya perdida, recordando a la que se tremolaba en los oficios del Miércoles Santo en la Catedral simbolizando el velo rasgado del templo que citan los evangelios. La de esta hermandad conserva los colores tradicionales, negro, con una cruz roja, y en su centro aparece bordada la Quinta Palabra ‘TENGO SED’ y el anagrama de Jesús rodeado de la corona de espinas junto a la lanza y la caña con la esponja cruzadas. Data del año 2014 y fue realizada por el Taller de bordados de la Hermandad
El Guión Sacramental
Autor: Anónimo.
Año: principios del s. XX.
En la procesión del Corpus Christi de 2017 fue novedad un guión sacramental que igualmente se incorporó al cortejo de la cofradía del año 2018. Insignia típica de las corporaciones eucarísticas, suele abrir sus cortejos señalando hacia atrás, esto es, la presencia de Jesús Sacramentado. Se trata de una pieza de orfebrería de principios del siglo XX, repujada, tanto asta como vara del mismo, en toda su totalidad. Está cargada de motivos eucarísticos, rematada por un cordero místico triunfante sobre el libro de los siete sellos. Toda la labor de orfebrería, restauración y nuevo remate fue realizada por el taller de Marmolejo Orfebres.
El Banderín de San Juan de Dios
Autor: Taller del convento de Santa Isabel.
Año: 1985.
Desde su fundación y primeras salidas el Viernes de Dolores, la cofradía ha hecho estación en el cercano hospital de San Juan de Dios, llevando a los enfermos allí ingresados la presencia cercana de sus titulares. La vinculación con la orden del mismo nombre que lo regenta, alcanza pues ya el medio siglo de existencia, uniéndoles fuertes lazos, como lo demuestran diversos momentos históricos ya analizados. Fruto de ello es el regalo que la misma hizo en 1985 de un banderín realizado sobre terciopelo negro con la técnica del bordado de aplicación, que representa el emblema de la comunidad juandeniana en su centro, rodeado por una decoración barroca, llevando igualmente su asta como remate el propio escudo de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios. El trabajo de bordado se hizo en el taller del convento de Santa Isabel, mientras que el asta es obra de Orfebrería Villarreal y el remate de la misma de Manuel García.
El Banderín de San Juan Evangelista
Autor: Antonio Rincón Galicia.
Año: 1976.
Una de las características de las cofradías contemporáneas es ir incorporando en el cortejo insignias de colectivos de la propia hermandad, normalmente portadas por el representante de uno de ellos. Tal es el caso de las que representan a la juventud, que desde los años 70 vienen agrupándose con funcionamiento muchas veces independiente. En la Hermandad de la Sed la incorporación de la insignia data de 1976. Se trataba de una bandera realizada por el bordador Rincón Galicia, ya en desuso. La actual insignia fue realizada por el Taller de bordados de la Hermandad y se estrenó en la Semana Santa de 2006. Presenta un paño de terciopelo burdeos, bordado en oro con un busto en su centro de San Juan Evangelista, patrón de la juventud y titular de la corporación, obra de Francisco Coronado de Morón de la Frontera.
El Estandarte Sacramental
Autor: Taller de Fernández y Enríquez.
Año: 1999.
Autor del asta: Orfebrería Delgado López.
Año: 2002.
La fusión de la cofradía de penitencia con la hermandad sacramental de la parroquia hace que la corporación alcance el doble carácter penitencial y eucarístico dejándose notar en el cortejo al incorporarse en 1999 una insignia que lo recordase. A diferencia de los estandartes de las antiguas hermandades sacramentales, que se asemejan en su forma a los simpecados (de ahí que se les llame simpecados sacramentales), y tal vez por la dificultad de portar estos en un recorrido tan extenso, se eligió la forma del estandarte de la cofradía de penitencia tradicional para su realización. Está bordado en oro sobre tisú blanco, y lleva en su centro el anagrama de María y la barca presente en la heráldica de la hermandad sobre la custodia rodeado de una rama de espigas y otra de azucenas. El diseño corrió a cargo de Francisco Javier Escudero Morales, mientras los bordados fueron realizados en el taller de Fernández y Enríquez y el asta, en plata de ley, es del taller de Orfebrería Delgado López.
El Libro de Reglas
Autor: Hermanos Celis.
Año: 1970.
Aunque se suele señalar que el libro de reglas es la última insignia del cortejo del Cristo y el estandarte el de la Virgen, el dato es inexacto, ya que en 34 cofradías el libro de reglas figura en el cortejo de la Virgen y en 29 en el del Cristo, recordando que hay ocho cortejos únicos de cofradías de un solo paso. Este es el caso de esta hermandad, en el que además tampoco es la última insignia del cortejo que antecede al Cristo de la Sed, como veremos a continuación. La presencia del libro de reglas en el cortejo tiene carácter arqueológico, pues en lo antiguo servía para dirimir la preferencia de paso cuando dos cofradías se encontraban en un punto, puesto que no se prefijaban los horarios e itinerarios itinerarios de manera tan exhaustiva como hoy en día y podía darse el caso de la coincidencia de dos hermandades, en cuyo caso se exhibían las reglas y pasaba primero la más antigua. Durante unos años la Hermandad de la Sed procesionó con un libro de reglas con pastas de terciopelo burdeos y una rica ornamentación barroca con el escudo de la hermandad en el centro, realizado en 1988 en el taller de Orfebrería Andaluza. Sin embargo, el libro de reglas primitivo de la hermandad, obra de Hernanos Celis de 1970, fue restaurado y ha vuelto al uso para el que fue creado.
El Relicario de San Juan de Dios
Autor: Orfebrería Delgado López.
Año: 2002.
Como hemos comentado con anterioridad, la vinculación de la hermandad con la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios se remonta a sus orígenes, habiendo visitado siempre la cofradía el antiguo sanatorio en su salida procesional. Tras el hermanamiento de ambas instituciones, la orden hizo entrega de una reliquia de su santo fundador (en concreto un fragmento de un hueso), realizando la hermandad un relicario con forma de báculo dentro del cual es procesionado cada Miércoles Santo desde el año 2002. La misma recuerda la forma del escudo de la orden, con dos ramas que se entrecruzan, a imagen del cayado que llevaba el santo. Fue realizado por Orfebrería Delgado López en el mencionado año 2002. Desfila rodeado por cuatro faroles realizados por el mismo taller al año siguiente.
PASO DE SANTA MARÍA DE CONSOLACIÓN
La Cruz Alzada
Autor: Manuel de los Ríos.
Año: 1992.
Otra insignia que se conserva en los cortejos desde hace siglos es una cruz alzada, que antiguamente representaba a la parroquia en la que radicaba la hermandad, ya que el clero de la misma acompañaba a la procesión. Inadecuadamente se le suele llamar cruz parroquial, cuando no siempre hoy en día es la cruz de la parroquia, como en este caso, en que la hermandad ha realizado su propia cruz, que suele encabezar el cortejo del paso de la Virgen portada por un acólito. La cruz se realiza íntegramente en orfebrería, con metal repujado y plateado, así como sobredorado, como el crucificado (inspirado en el Cristo de la Expiración, comúnmente conocido como del Cachorro) o el anagrama de Jesús que se representan, todo con inspiración barroca. Fue realizada por Manuel de los Ríos en 1992.
El Banderín de la Virgen de los Reyes
Autor: Taller de la hermandad.
Año: 1988.
No es extraña la presencia de la Virgen de los Reyes,patrona de Sevilla y su archidiócesis, en los cortejos de las cofradías de penitencia, no solo en insignias, como ésta, sino en respiraderos, cartelas, coronas, etc. La devoción que desde hace más de siete siglos se tiene a la imagen se traduce en representaciones de la misma, significando de esa manera el amor filial de sus hermanos a tan excelsa imagen de la Virgen. El banderín tiene un paño de terciopelo azul con una fina cenefa bordada y en el centro un lienzo que representa a la Señora entre la Giralda y la parroquia de la Concepción. Fue estrenado en 1988 y se realizó en un taller propio de la hermandad, que dirigía Francisco Javier Escudero Morales. La pintura central fue realizada por Alfonso Caballero Rosende.
La Bandera de la Virgen
Autor: Taller de la hermandad.
Año: 2013.
No tiene un significado especial la presencia de banderas en el cortejo de los pasos de Virgen, pues ya está presente en el de los de los Cristos, como es el caso. No obstante no es ni mucho menos excepcional el hecho, que se produce en muchas cofradías, pues estaríamos repitiendo el significado ya expresado anteriormente con la bandera del Cristo. De raso blanco y celeste, con bordados con el lema MARIA MADRE DE LA IGLESIA y la heráldica de la hermandad en el centro, su estreno se produjo en el año 2014 y fue realizada por el Taller de bordados de la Hermandad.
El Banderín de la Virgen del Carmen
Autor: José Ramón Paleteiro Bellerín.
Año: 1988.
Se suele calificar a las cofradías sevillanas como iglesiasen la calle, al mostrar en muchas ocasiones al espectador, comoes el caso, en todo o en parte, el propio templo en que radicanpor su fuerte implicación con el mismo. Existiendo enla parroquia de la Concepción Inmaculada un altar con unaimagen de la Virgen del Carmen, se quiso incorporar al cortejouna insignia que lo recordase. La misma consta de unpaño de terciopelo marrón, llevando el escudo carmelitadescalzo en el centro y bordados barrocos alrededor, siendoobra de José Ramón Paleteiro Bellerín y estrenándose en1988. Fue una donación de la familia Jiménez Alba.
El Guión Cardenalicio
Autor: José Manuel Ramos.
Año: 1981.
La decisiva participación del cardenal Bueno Monreal en la fundación de la hermandad, ya estudiada en otro lugar de esta obra, influyó a la hora de incorporar una insignia que lo recordase. Este es un ejemplo de lo que comentábamos al principio de este capítulo sobre la simbología de las insignias y la historia de las hermandades.
Cualquier persona que contemple la cofradía y vea este guión puede relacionar a la hermandad con el cardenal arzobispo que la aprobó a través de ella. El guión tiene una base de terciopelo color burdeos, pero en su mayoría está realizado en metal repujado y plateado. Se estructura en un paño horizontal que se une por un lateral al asta y es llevado hacia delante, presentando una rica decoración barroca en el que podemos ver por una cara una representación del escudo del cardenal y en la otra su lema: LA PAZ ES FRUTO DE LA JUSTICIA. Se estrenó el Miércoles Santo de1981, sustituyendo otro anterior de 1972 y es obra del orfebre José Manuel Ramos.
El Guión del Rosario
Autor: Manuel de los Ríos Navarro.
Año: 1975.
Otra insignia mariana es la alusiva al Rosario, oración por excelencia dedicada a la Madre de Dios, siendo además una de las más antiguas del cortejo del paso de la Virgen. Realizada íntegramente en orfebrería, en metal repujado y plateado, su paño es portado hacia delante y en él vemos la inscripción MATER ECCLESIAE ORAPRO NOBIS, que alude a la Letanía Lauretana de donde se sacó el título de Madre de la Iglesia que acompaña a la advocación de la dolorosa. Fue realizado por el orfebre José Manuel Ramos a finales de la década de los 70 y restaurado en 1981 por Manuel de los Ríos15, que eliminó la malla que en el centro tenía originalmente.
La Bandera Concepcionista
Autor: Taller de la hermandad.
Año: 2005.
Tal vez por su mayor sencillez y consecuente facilidad para su realización, la bandera o banderín concepcionista es la insignia más común en los cortejos que anteceden a los pasos de Virgen. Es una insignia presente en 42 cortejos. En las banderas concepcionistas podríamos distinguir tres tipos: banderas votivas, banderas dogmáticas y banderas de la Inmaculada, según lo que representen. Por banderas votivas entendemos aquellas que reflejen el voto concepcionista que realizó la hermandad y suelen tener una inscripción alusiva al mismo. Las banderas dogmáticas se refieren a la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción, acaecido en 1855, o a la conmemoración de algún aniversario del mismo. Las que denominamos banderas de la Inmaculada tienen una representación de la Virgen María en el misterio de su Concepción Inmaculada, aunque hay otra variante consistente en que solo lleven la inscripción SINE LABE CONCEPTA y no una imagen (pictórica o escultórica). También pueden llevar la inscripción por el reverso y la imagen en el anverso. En este tipo de banderas hay una gran variedad, contrariamente a lo que suele pensarse, como vemos.Podría cuestionarse el hecho de seguir sacando banderas votivas cuando ya se ha proclamado el dogma, pero con ello se puede constatar que la hermandad haya formulado su voto solemne o un reconozca el misterio como dogma de la Iglesia. Los cortejos en buena parte reflejan la historia de cada hermandad y en algunos casos el voto concepcionista es una parte fundamental de esa historia. El mimetismo con que muchas veces se opera en estos casos hace que se asimile el modelo de insignias pertenecientes a otras hermandades, cuando lo realmente relevante es el dogma y no el voto. La fórmula neutra es la representación de la Inmaculada Concepción que, por otra parte, es también la más repetida. En el caso que nos ocupa, además, se trata de la titular de la parroquia y titular también de la propia hermandad, lo cual justifica su presencia y que adopte la forma indicada de la Inmaculada realzada con bordados en oro alrededor, todo sobre tisú celeste. Se estrenó en 2005, aunque ese año la cofradía no salió por lluvia, siendo realizada en el taller propio de la hermandad. El diseño y la obra pictórica es de Alfonso Magüesín.
El Estandarte
Autor: Taller La Esperanza.
Año: 1981.
Es la insignia principal de la hermandad, puesto que ha de llevarse en las representaciones, así como presidir los cultos. Suele cerrar los cortejos, aunque no siempre es así. En la mayoría de hermandades con más de un paso lo es (45 ocasiones), como ocurre en la presente. Adopta la forma de una bandera recogida con un cordón en señal de duelo, realizándose ya directamente con ese formato, lo cual ha hecho que vulgarmente se la conozca como bacalao. El estandarte de la Hermandad de la Sed se estrenó en 1981, siendo realizado en el taller La Esperanza, regentado por José Guillermo Carrasquilla, pero en 1994 fue pasado a nuevo terciopelo y enriquecido con nuevos bordados por José Ramón Paleteiro. Consta de un paño de terciopelo color burdeos, figurando en el centro el escudo de la hermandad, rodeado de una rica cenefa bordada en oro, mientras en su parte superior igualmente
hay bordados en oro decorando la pieza