PINTURAS, CARTELES Y CERÁMICAS
No han sido pocos los pintores que a lo largo de estos cincuenta años han mostrado a nuestras imágenes a través de sus obras por distintos motivos. Es así como se ha venido ampliando el patrimonio pictórico propio de la Hermandad mediante un conjunto de representaciones sobre distintos soportes, como el lienzo, el tisú, las tablas o hasta la cerámica. A continuación, exponemos y analizamos cada una de estas interesantes obras.
Álvaro Cabezas García

La plasmación gráfica de las imágenes sagradas ha sido siempre un mecanismo de considerable éxito a la hora de difundir la devoción particular. Como resulta bien conocido, la función religiosa de aquellas ha permanecido vigente a través del papel, del lienzo o de los soportes derivados de la reproducción mecánica, como la cartelería, la fotografía o, incluso, las grabaciones audiovisuales. Todos estos medios han permitido, por consiguiente, el contacto entre el fiel y el Santísimo Cristo de la Sed y Santa María de Consolación, Madre de la Iglesia, aún en la distancia. También han servido, en muchos casos, para recrear la presencia, de manera tangible, de las imágenes titulares de la corporación en aquellos ámbitos de decisión o representación de importancia, por ejemplo, en las salas de junta, en los despachos de los oficiales o en los actos y celebraciones del pregón anual de la hermandad, incluso en las mismas calles. Y, quizá más recientemente, para ilustrar publicaciones oficiales de la misma, algo que ha contribuido a desarrollar su iconografía e incrementar el patrimonio artístico de la cofradía de Nervión.
Aunque no se trata de un conjunto muy extenso, es oportuno, por lo menos de forma somera, ofrecer un registro de la mayoría de las representaciones pictóricas que han tenido a la Hermandad de la Sed como asunto principal y que forman parte de su patrimonio. Huelga decir que todas las representaciones que señalaré a continuación fueron realizadas desde el último tercio del siglo XX hasta fechas actuales, es decir, en el lapso de cincuenta años de vida de la hermandad. En cuanto a los autores, en la mayoría de los casos, se trata de personas muy vinculadas con la vida de la misma, refiriéndome incluso a hermanos que marcaron desde sus inicios el tono estético de la corporación.
Las pinturas
Inmaculada Concepción
Gloria del antiguo paso de palio de Santa María de Consolación Madre de la Iglesia. Casa Hermandad. Salón principal. Antonio González. 1983.
La Hermandad de la Sed se fundó en 1969, pero no fue hasta 1971 cuando realizó su primera salida procesional. Desde ese año y hasta la Semana Santa de 1979, lo hacía los Viernes de Dolores por el barrio de Nervión, teniendo como principal cometido la visita a los reclusos de la cercana cárcel de la Ranilla. En la primera salida procesional tan solo salió el Cristo de la Sed, siendo al año siguiente cuando se incorporó al cortejo Santa María de Consolación Madre de la Iglesia bajo un palio liso que llevaba como único ornato una gloria de estampa con la representación de la Inmaculada Concepción, en clara alusión tanto a la sede parroquial de Nervión como a la Hermandad Sacramental de Caballeros Congregantes de la Inmaculada Concepción con la que se había fusionado en el mismo año de 1972. Algunos años más tarde, en 1983, esa obra se sustituyó por este lienzo realizado por Antonio González. Se trata de una pintura ovalada, claramente inspirada en la Inmaculada de la media luna (Madrid, Museo Nacional del Prado, c.1665), realizada por Bartolomé Esteban Murillo (Sevilla, 1617–1682). Las diferencias entre ésta y aquella se resumen en que la de la Hermandad de la Sed no acompaña a la Virgen con la citada media luna que da nombre a su fuente inspiradora, ni con las cabezas de ángeles que aparecen en la original. En 1985, cuando se estrenó el nuevo palio bordado, obra de Antonio J. Dubé de Luque, fue sustituida por la gloria que muestra la Virgen de las Maravillas que se veneraba en la iglesia sevillana de San Juan de la Palma hasta 1936 y que compartía titularidad con el Cristo de la Sed en la hermandad allí radicada y hoy extinguida. Desde el año en que dejó de utilizarse como gloria del palio, el lienzo de la Inmaculada Concepción ha sido un objeto móvil frecuentemente utilizado por el equipo de priostía de la Hermandad para adornar, por ejemplo, muchas de las ediciones del pregón de Nervión y, desde 2015, el salón principal de la remozada casa Hermandad de la calle Alejandro Collantes.
Virgen de las Maravillas
Gloria del actual paso de palio de Santa María de Consolación Madre de la Iglesia. Casa Hermandad. Vitrinas de exposición. Antonio J. Dubé de Luque. 1985.
La primera fase de bordado del nuevo palio comenzó en abril de 1985, encargándose este cometido al taller de Esperanza Elena Caro (La Campana, 4 de septiembre de 1906 – Sevilla, 6 de marzo de 1985). Para la ocasión, Dubé de Luque diseñó, pintó sobre tisú y donó la gloria que habría de sustituir la imagen anterior de la Inmaculada que llevó la Virgen desde 1972. La inclusión en el palio de la Virgen de las Maravillas no hacía más que relacionar la congregación del Miércoles Santo con aquella otra del Cristo de la Sed y la Virgen de las Maravillas radicada en la iglesia de San Juan de la Palma. La talla inspiradora fue realizada en 1738 por parte del que fuera oficial de la Hermandad sacramental de la citada parroquia de la calle Feria, Benito de Hita y Castillo y de Guzmán (Sevilla, 12 de enero de 1714 – 2 de noviembre de 1784). La plasmación de aquella escultura no es del todo similar en esta gloria del techo de palio, sino una versión más o menos libre en manos de Dubé, que nos muestra a la Virgen sedente sosteniendo al Niño Jesús con mirada serena mientras San Juan Bautista niño se acerca para jugar con su primo. El misterio reposa sobre una media luna.
Virgen de los Reyes
Banderín de la Virgen de los Reyes. Casa Hermandad. Vitrinas de exposición. Alfonso Caballero Rosende. 1988.
Para la realización de esta insignia, bordada por un grupo de hermanos, el profesor de enseñanza media Alfonso Caballero Rosende, realizó la ilustración de la patrona de Sevilla y su Archidiócesis para completar el bordado. Por estos años, este autor estuvo muy vinculado a la Hermandad, acometiendo otras obras como un Escudo de la Hermandad Sacramental con los símbolos marianos y eucarísticos en 1990 o la importante pintura de la primera salida del Cristo de la Sed al año siguiente.
Santísimo Cristo de la Sed
Primera salida, 2 de abril, Sevilla 1971. Dependencias de la calle Valeriano Bécquer. Antigua sala de juntas. Alfonso Caballero Rosende. 1991.
Este óleo sobre lienzo fue ejecutado por Alfonso Caballero Rosende al cumplirse los veinte años de la primera salida procesional del Cristo de la Sed -ocurrida el 2 de abril de 1971 y que como recuerdan muchos, fue accidentada a causa de la aparición de la lluvia- con intención de fijar en la memoria aquel hito en la joven historia de la corporación de Nervión. Por eso es interesante apreciar cómo el autor ha representado de manera reconocible algunos personajes destacados como el párroco de la Inmaculada Concepción e impulsor de la Hermandad, Manuel Calero Gutiérrez, presidiendo el paso de Cristo. A este respecto, también es curioso apreciar las antiguas andas procesionales, ideadas por la sencillez que aconsejó el cardenal Bueno Monreal, realizadas entonces en madera barnizada y que procesionaron hasta 1989. Aparece como era previamente al enriquecimiento que sufrió en 1980 con motivo de su incorporación a la nómina de la Semana Santa sevillana, cuando se le añadieron varias figuras de bronce modeladas por el artista Juan González Ventura y unas placas o apliques de bronce realizados por el orfebre José Manuel Ramos. En 1989 fue adquirido por la Hermandad de la Vera Cruz de Córdoba, portando desde 1991 la imagen de Nuestro Señor de los Reyes, un nazareno con la cruz al revés, realizado por Dubé de Luque. También es ilustrativo del lienzo el mostrar el ámbito por el que discurre la procesión de penitentes encapuchados sin cartón, tras una sencilla cruz de madera y dos faroles y cirios color tiniebla. Efectivamente, en lontananza se aprecia parte del urbanismo más relacionado con la Cofradía: la Parroquia de la Inmaculada Concepción, el Hospital de San Juan de Dios, la Torre del Oro, la Giralda, los Caños de Carmona y hasta el Humilladero de la Cruz del Campo. Por último, el público asiste emocionado al paso del Cristo de la Sed, respetuosa y devotamente.
Orlas. Ilustraciones del Libro de Reglas
Casa Hermandad. Sala de juntas. Francisco García Anillo. 1997. Como es costumbre en Sevilla, el Libro de Reglas de la Hermandad de la Sed contiene dos vitelas con las representaciones pictóricas de los Sagrados Titulares de la cofradía. Estas orlas se han utilizado desde entonces para enmarcar las convocatorias de los actos y cultos de la corporación en todos aquellos medios oficiales que ha considerado conveniente, incluso variando su color y dimensiones en función de las necesidades. Formalmente están compuestas por elegantes cenefas, que resultan de la relación de diferentes elementos vegetales. Se completan con el escudo de la hermandad y por otros detalles, como el de los cuatro clavos rodeados por una corona de espinas a la izquierda y la lanza con una esponja clavada en la punta y un recipiente a la derecha. En la zona inferior central aparece un tondo rodeado por el cordón rojo del que pende la cruz, en cuyo interior se percibe un ostensorio portando la Sagrada Forma enmarcada por una espiga de trigo y un racimo de uvas verdes, aunque en la actual Regla se cita la sustitución de este elemento por un ramo de azucenas. En los laterales del tercio inferior aparecen dos ángeles, uno a cada lado, de pie sobre una peana, alados y vestidos con túnica blanca en actitud orante uniendo sus manos junto al pecho. La que enmarca el rostro de la Virgen es muy parecida a la anterior, salvo por las siguientes características: la cruz sobre barca aparece en una de las esquinas superiores y el anagrama de María al otro lado. En el tondo inferior central se encuentra la Inmaculada Concepción. El autor, Francisco García Anillo, fallecido recientemente, estuvo vinculado tanto por formación como profesionalmente a la Escuela Superior de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría donde fue profesor de Dibujo. Posteriormente realizó algunos carteles de ferias y fiestas locales y tuvo cierta especialización en el campo de las vitelas para los libros de reglas de las Hermandades, como lo atestigua las de la vecina Hermandad del Sagrado Corazón (1997) o las de la Estrella (1998).
Inmaculada Concepción
Bandera concepcionista. Casa Hermandad. Vitrinas de exposición. Alonso Magüesín de la Rosa. 2005.
Los bordados de la bandera concepcionista fueron realizados por el taller de bordados de la hermandad, y en 2005 fueron rematados por la pintura de Alonso Magüesín, un pintor muy vinculado a la hermandad, que había formado parte de la comisión organizadora del XXV Aniversario fundacional (1993- 1994) y también había realizado las cartelas pintadas del nuevo paso de Cristo. El óvalo muestra a la Virgen Inmaculada, sostenida por angelotes y recibiendo la gracia del Espíritu Santo. Al fondo se percibe, entre nubes, la Catedral de Sevilla con la torre de la Giralda, y una bandada de pájaros que se arremolinan en torno a la divina aparición.
Santa María de Consolación, Madre de la Iglesia
Casa Hermandad. Planta alta. Octavio Fernández. 2012.
Este cuadro, realizado por su autor con la intención expresa de donarlo a la hermandad, se expuso por primera vez en el Ayuntamiento de Sevilla con motivo de la exposición del estreno de las caídas de palio de Santa María de Consolación en marzo de 2012. La corporación lo bendijo en la misa propia del mes de septiembre del mismo año, prometiendo que ocuparía un lugar destacado en la nueva casa hermandad, donde hoy preside una de las estancias nobles de la planta superior. El autor, Octavio Fernández (Sevilla, 12 de junio de 1942), es licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla y siempre ha estado muy vinculado a la parroquia y a la Hermandad. Quiso inspirarse para realizarlo en una fotografía de Daniel Villalba, ya que el estilo de la pintura del autor es el realismo y pretende resultar un trasunto de la propia visión humana. De alguna manera podría ser este cuadro un «trampantojo a lo divino», ya que se muestra no una idealización de la Virgen, sino su carácter escultórico y ornamental, vestida de reina, con su característico manto azul de vistas y la corona de salida, depositada la talla sobre una alfombra y accesible para el devoto.
Los carteles y pinturas en boletines
Cartel del XXV Aniversario Fundacional
Casa Hermandad. Sala de juntas. Antonio J. Dubé de Luque. 1994.
Fue presentado el 21 de enero de 1994 en el colegio de la Sagrada Familia con motivo de la celebración del XXV Aniversario fundacional de la Hermandad de la Sed. Sirvió para enmarcar los muchos actos que tuvieron lugar ese año para celebrar la efeméride, así como portada de la publicación que los recogió para el recuerdo. El autor y asesor artístico de la hermandad, Dubé de Luque, se encargó de realizarlo no solo como artista de cabecera de la corporación, sino además como ideólogo e impulsor de su estética por esos años. La composición que plantea es de líneas e impronta clásica, muy enraizada en la forma frecuente del cartel cofradiero. Bajo una arcada inspirada en las de Aníbal González Álvarez-Ossorio (Sevilla, 1876–1929) para la plaza de España y adornada con roleos y escudos, se sitúa en el centro el de la Sed, el escudo de la ciudad de Sevilla, a izquierda, y el de la Catedral hispalense, a derecha. Aparece el Santísimo Cristo de la Sed irradiando luz por los clavos de sus muñecas a dos inmuebles que lo flanquean: por un lado, la Giralda, y por otro la parroquia de la Inmaculada Concepción, sede de la corporación. Bajo el crucificado aparece la imagen de la Dolorosa de Consolación, vestida con gusto a base de encajes en el tocado, con rica toca de sobremanto y con manto azul y saya blanca, ambos bordados en oro. Sobre su pecho se aprecia tanto el puñal como la cruz pectoral y sobre la mano derecha porta jazmines, mientras que con la izquierda sostiene el barquillo que representa la Iglesia de la que la Virgen es Madre. Es muy curioso que la imagen no porte corona, pero puede explicarse por la posición que ocupan ambos titulares: es la Sed de Cristo la que está coronando el Consuelo de la Virgen, tal y como indica la inscripción que centra un pedestal en la zona inferior: «CONSOLATRIX AFLICTORUM». A ambos lados de María Santísima se disponen nazarenos de la cofradía del Miércoles Santo: el de la izquierda, porta cirio blanco por ser del cortejo del palio y la túnica y capa características de la hermandad, mientras que el de la derecha es un penitente que porta su cruz al hombro yendo ataviado con el atuendo que utilizaba la cofradía antes de ir a la Catedral, es decir, el característico de la estación de penitencia a la cárcel los Viernes de Dolores de 1971 a 1978. Reúne, por tanto, esta pintura los valores estéticos de la hermandad de entonces y hace alusión a los de los orígenes, materia en la que nadie como Dubé estaba más versado y podía haber resumido así, en el lienzo y la cartelería, de forma más adecuada y precisa.
Orlas
Publicada en Hermanos nº 82, de 1997. Francisco García Anillo. 1996.
Los elementos diferenciadores de ésta con respecto a las orlas que realizará García Anillo al año siguiente para las páginas centrales del Libro de Reglas son la cruz de la Sed y la representación de un nazareno en el ángulo inferior izquierdo con cirio rojo.
Cartel conmemorativo del XXV aniversario de la cuadrilla de hermanos costaleros de Nervión
Luis Alberto García Jeute. 2008.
Con motivo de la celebración del primer cuarto de siglo de la fundación de las cuadrillas de hermanos costaleros en la Hermandad de la Sed, Luis Alberto García Jeute, realizó una acuarela apropiada a la efeméride que se presentó el 3 de enero de 2008 en la casa hermandad. Siempre con un tono celeste bien presente, tan característico de la corporación del Miércoles Santo, dispuso tres zonas bien diferenciadas: el rostro de la Virgen, la parroquia de la Inmaculada Concepción y los pies de los costaleros.
Cartel Mater Ecclesiae
Casa Hermandad. Planta alta. Juan Antonio Aguilar Jiménez. 2014. 120 x 60 cm.
Se trata, en este caso, de la pintura que celebraba el L Aniversario de la proclamación de María Santísima de Consolación como Madre de la Iglesia por parte de Pablo VI en 1964, descubierta en la parroquia de la Inmaculada Concepción estando la Virgen de besamanos extraordinario el 20 de noviembre de 2014. Su autor, doctor en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, siempre muy cercano a la corporación, recibió el encargo para realizarlo en fechas próximas a cumplirse la citada efeméride. Sin duda, María Santísima de Consolación como Madre de la Iglesia es el centro de la composición, aunque en la pintura pueden diferenciarse claramente tres partes, de abajo arriba: la torre de la parroquia de la Inmaculada Concepción, San Pedro del Vaticano y la Giralda, la Virgen en el centro –que emerge de un rompimiento de gloria–, y por último, en la zona superior las letras MATER ECCLESIAE, de la misma forma que aparece en la fachada dedicada a la plaza de San Pedro del palacio apostólico de Roma, colocadas allí en 1981 por San Juan Pablo II tras el atentado que sufrió ese mismo año. El tono que preside toda la composición es el miel, resultante de las nubes, el firmamento y el ambiente que comparten tanto Roma como Sevilla. El único destello celeste lo provoca la aparición de la Dolorosa, serena y dulce como Madre perfecta para sus hijos.
Cartel del 50 Aniversario Fundacional de la Hermandad de la Sed
Nuria Barrera. 2019.
La Hermandad de la Sed encargó a la pintora Nuria Barrera Bellido (Carmona, 1972), uno de los activos más importantes de la actualidad, su cartel anunciador del L Aniversario fundacional. El 14 de febrero de 2019, en el Salón Colón del Ayuntamiento de Sevilla, se descubrió la pintura que realizó al efecto, presidida por el Cristo de la Sed –representado sobre una cruz cepillada–, y que está rodeado, al modo de las antiguas letanías, por momentos muy importantes en la historia de la corporación, como la bendición de ambos titulares, la primera venia en la Campana o el hermanamiento con San Juan de Dios. El número «50» preside desde la cabecera de la cruz toda la composición.
Sed Hermanos
Casa Hermandad. Despacho de mayordomía. Adrián Riquelme Plaza. 2015.
Para ilustrar la portada del anuario Hermanos, nº 131, de marzo de 2015, el hermano Adrián Riquelme Plaza realizó esta pintura que hoy atesora la Hermandad en sus dependencias principales y que el autor, por entonces estudiante de Bellas Artes, quiso plasmar aunando las miradas, tanto del Cristo de la Sed como de Santa María de Consolación, para encontrar en ellos y en su ánimo imperativo de hermandad (el «Sed hermanos» del título), la realidad más cotidiana de la misma.



Al igual que este caso, otras pinturas dedicadas a los titulares de la Hermandad, han aparecido en varios boletines y anuarios, de los que resultan interesantes el Cristo de la Sed de trazo difuminado que apareció en las páginas interiores del Hermanos, nº 133, de 2017, la florida Santa María de Consolación, Madre de la Iglesia de Maika Galán del Toro, realizada para el Hermanos, nº 134, de 2018, o el Santísimo Cristo de la Sed de Nina Gutiérrez Fernández para la publicación nº 128, de 2012. Sin duda es un acierto que cada una de las publicaciones anuales de la Hermandad se ilustre con una pintura, algo que contribuye a seguir incrementando el patrimonio visual de la corporación.
Quizá más discretas para ser catalogadas de manera exhaustiva en este estudio pueden ser las que muestran a las imágenes, en muchos casos, para el propio consumo devocional privado, como la que plasma los rostros, tanto del Cristo como de la Virgen, junto a la fachada de la parroquia de la Inmaculada Concepción con la Catedral y la Giralda al fondo, entre rayos intermitentes, obra de José González –autor también de otra pintura que muestra, con la misma forma, al Cristo solo y dirigiendo su mirada al espectador–, o la firmada por Casal que presenta el rostro del Santísimo Cristo de la Sed coronado de espinas y con las potencias que le otorgan el símbolo inequívoco de realeza y poder.
Cartel del mes de la Virgen
José Tomás Pérez Indiano. Septiembre de 2019.
El viernes 30 de agosto de 2019 se presentaba el cartel con el que la Hermandad de la Sed quiso celebrar su mes de la Virgen en septiembre del L Aniversario de la fundación de la Hermandad. Para ello contó con el reputado artista Pérez Indiano que, fiel a su estilo neofauvista, dispuso una composición rectangular apaisada donde, bajo la inscripción CONSOLACIÓN (diseñada la letra O con la granada de San Juan de Dios), MES DE LA VIRGEN SEPTIEMBRE se diferencian, con claridad, el rostro de María Santísima de Consolación Madre de la Iglesia en el extremo izquierdo, mientras en el contrario se diferencia la silueta del crucificado sobre un «Mar de Fe», en palabras del propio autor. Sobre el oleaje se aprecia el barco de la Iglesia, de la que la Virgen es Madre, en clara alusión a la celebración de la efeméride del V Centenario de la primera circunnavegación del mundo por parte de Magallanes y Elcano. En el fondo de la composición se han insertado unos versos de Álvaro Carmona para celebrar el aniversario fundacional. Se trata, por tanto, de una obra de enorme novedad realizado mediante acuarela y acrílico.
Papeleta de sitio de la procesión extraordinaria del cincuentenario
Nuria Barrera. 2019.
El viernes 6 de septiembre de 2019, al término del segundo día de Triduo a María Santísima de Consolación Madre de la Iglesia, se presentó en la parroquia de la Inmaculada Concepción, el diseño de la papeleta de sitio de la procesión extraordinaria que tendría lugar muy poco después, el sábado 28 de septiembre, con el Santísimo Cristo de la Sed por las calles del barrio de Nervión. Al igual que ocurriera con el cartel conmemorativo de la celebración del L Aniversario fundacional, la autora encargada de realizar la papeleta extraordinaria fue la artista Nuria Barrera, que figuró al titular de la hermandad –sin cruz y en tonos grisáceos y con el único detalle de color de las brillantes potencias sobre su cabeza–, a un lado de la composición con objeto de dejar espacio en la impresión de los datos de los hermanos y hermanas que figurarían en el cortejo. Un listón morado, a modo de travesaño de la cruz, recorría de un lado a otro la composición.
La cerámica
En este apartado incluiré algunos de los más conocidos retablos de azulejos cerámicos en los que están representados los titulares, principalmente los que forman parte del patrimonio propio de la hermandad. La función que desarrolla este tipo de obras es fundamental para el devoto y el cofrade, y no es otra que amparar la oración y reavivar el recuerdo cada vez que se camina por las calles del barrio. Ante ellos se puede realizar una plegaria, sobre todo por su carácter sustitutivo de la imagen en un momento determinado en que esté la parroquia cerrada o, incluso, en la distancia del descanso vacacional. En Sevilla se suelen disponer por parejas o tríos en las fachadas de los templos, para que cada uno de los azulejos represente a uno de los titulares de la corporación.
Retablo cerámico de la Hermandad de la Sed
Dependencias de la calle Valeriano Bécquer. Alfonso Magüesín de la Rosa. 1991.
El 6 de noviembre de 1991 fue bendecido un retablo cerámico, obra del artista de cabecera de la hermandad por esos años, que señalaba, en el número 9 de la calle Valeriano Bécquer, la ubicación de la casa Hermandad. Sobre un fondo de roleos, se disponen dos óvalos que enmarcan los rostros del Santísimo Cristo de la Sed y de María de Consolación Madre de la Iglesia, el primero junto a una pequeña reproducción de la fachada de la parroquia, y la segunda junto a otra del templete de la cruz del campo. En el centro, preside una reducida imagen de la Inmaculada Concepción coronada. Bajo el escudo de la hermandad, aparece la inscripción del año: «MCMXCI» y el rótulo «Casa Hermandad del Santísimo Cristo de la Sed. Nervión».
Rótulo de la calle Cristo de la Sed
Manuel Ruiz Gil. 1994.
El 8 de diciembre de 1994 se bendijo el rótulo de la nueva nomenclatura de la calle Padre Coloma, que se cambió por Cristo de la Sed, junto a la parroquia de la Inmaculada Concepción. La inscripción «Calle Cristo de la Sed» aparece flanqueada, por un lado, por la efigie del Santísimo Cristo de la Sed, y por otro, por el escudo de la corporación. Todo está realizado en tonos azul cobalto sobre fondo blanco.
Azulejos de la fachada de la Casa Hermandad en la calle Alejandro Collantes
Emilio Sánchez Palacios. 1998.
Aquel año el entonces arzobispo de Sevilla, fray Carlos Amigo Vallejo, procedió a la inauguración de la casa hermandad de la corporación en la calle Alejandro Collantes, y bendijo en la fachada del que fuera antiguo colegio del Buen Fin un azulejo con las imágenes, que representa, en esta ocasión, a la Virgen vestida de hebrea y otro con el escudo corporativo
Azulejos del Santísimo Cristo de la Sed y de María de Consolación Madre de la Iglesia
Emilio Sánchez Palacios. 1998.
Aquel año el entonces arzobispo de Sevilla, fray Carlos Amigo Vallejo, procedió a la inauguración de la casa hermandad de la corporación en la calle Alejandro Collantes, y bendijo en la fachada del que fuera antiguo colegio del Buen Fin un azulejo con las imágenes, que representa, en esta ocasión, a la Virgen vestida de hebrea y otro con el escudo corporativo