Aunque a más de uno le pueda sonar raro, el Martes Santo puede ser sin duda el día más bonito de la Hermandad de todo el año. Esto es así porque es sin duda el día de la Ilusión.
El día de la ilusión porque hace dos años que no podemos realizar nuestra Estación de Penitencia.
El día de la ilusión porque los floristas y priostes se afanan en dejar los pasos perfectamente preparados para que el Miércoles Santo nuestros pasos estén perfectamente exhornados.
El día de la ilusión porque las camareras preparan los últimos detalles para el pectoral, la granada de San Juan de Dios, los alfileres para dejar el tocado perfecto,…
El día de la ilusión porque los diputados acaban de dejar listos los cirios, palermos y demás enseres que serán portados por los hermanos el Miércoles Santo.
El día de la ilusión porque muchísimos hermanos acuden a la Parroquia a ver las listas de la Cofradía.
El día de la ilusión porque las casas de Nervión duermen con miles de capas y túnicas perfectamente planchadas.
El día de la ilusión porque todos nos acostamos soñando que llega mañana.
